Como todos los domingos, continúo mi con revisión de la lista de cortos animados realizada por el misterioso profesor Beltesassar. Esta vez ha llegado el turno de No time for nuts (Sin tiempo para nueces), corto realizado en 2006 por los animadores estadounidense Chris Renaud y Mike Thurmeier, para la productora Blue Sky
Blue Sky es famosa por la franquicia de largometrajes animados Ice Age, de la que No time for Nuts y Gone Nutty, que ya comentamos hace tiempo, son cortos destinados a anteceder la proyección de los largos correspondientes. Ése, precisamente, es uno de sus defectos, ya que devienen obras que exigen un cierto conocimiento previo de las películas para disfrutarlos completamente. Aún así, esta dependencia sería disculpable, sino fuera por que además caen en varios de los vicios que astragan la animación 3D comercial. Ésa que, como sabrán, tanto aprecio y admiro.
Esos defectos se reducen básicamente a dos: la obsesión con el hiperrealismo al cual se supeditan el resto de los elementos del corto, tanto visuales como narrativos, a la que viene a unirse la necesidad de exprimir al máximo las posibilidades técnicas, vengo no venga a cuento. Ambas servidumbres provocan que estas obras se vean sobrecargados de peripecias e imposibilidades, en un claro intento circense por alcanzar el más difícil todavía, objetivo que puede ser muy del gusto del público, pero que a mi me hastía a los pocos minutos de empezar el corto.
¿Es una exageración lo que digo? Quizás, aunque sea odioso, vale la pena comparar este corto con Much Ado about Nutting (Mucho ruido por las nueces) dirigido en 1953 por Chuck M Jones. En él, el famoso director de animación americano dedica un tiempo considerable del corto a caracterizar su personaje como codicioso y avaricioso, tanto que es capaz de dejar a un lado una pequeña recompensa segura, por una mayor improbable. El resultado obvio es el fracaso en todos sus intentos, cuya preparación es asímismo descrita con todo lujo de detalle, de manera que al final el espectador acabe compartiendo esa misma frustración que golpea al protagonista, tan similar a la que sentimos a diario.
Nada de esto se intenta en No time for Nuts, que basa su impacto en apabullar al público, tanto técnica como narrativamente, sin dejarle tiempo para que respire, mucho menos para que piense; mientras que en el corto de Jones la deliberada lentitud, busca y consigue la complicidad del espectador. Al final, una vez constatada y admirada la evidente pericia técnica del producto final, el corto se revela completamente vacío, irrelevante, sin que llegue a merecer un segundo visionado, puesto que nada nuevo se podrá encontrar en él. De hecho, todos estos cortos modernos a remolque de películas de éxito, aunque cuentan con las últimas maravillas de la técnica, no son sino un (mal) ejercicio en primitivismo, puesto que tiran por la borda las conclusiones del clasicismo animado formalizada en la década de los cuarenta... sin aportar a cambio un nuevo canon estético, fuera del poner dinero y más dinero sobre la mesa.
No les entretengo más y como siempre, le pego aquí el corto. Les pido disculpas si he parecido demasiado intransigente, pero ya saben lo que me molesta que estas obras muy menores estén en boca de todos, convertidas en paradigmas de la animación para el público y gran parte de la crítica, cuando las que son realmente importantes quedan para siempre en el olvido... excepto para cuatro chalados como yo.
Scrat No Time For Nuts [2006] por dm_50e9d1446e5f0
No hay comentarios:
Publicar un comentario